Los parques eólicos, tanto terrestres como marinos, son cruciales para la transición global hacia las energías renovables. A medida que estas centrales eólicas aumentan en tamaño y complejidad, mantener una comunicación fiable y de alto rendimiento entre sistemas se vuelve cada vez más crucial.
Un desafío importante es que los aerogeneradores están distribuidos en áreas extensas. Para maximizar la eficiencia energética, la posición de cada aerogenerador se ubica estratégicamente según el terreno y los patrones de viento. Esta dispersión geográfica dificulta técnicamente la transmisión fiable de datos, especialmente entre la góndola y la base de la torre.